Chloé inició su viaje en la perfumería en 1975 con Chloé Original, pero fue el lanzamiento de Chloé Eau de Parfum en 2008 lo que redefinió la identidad olfativa de la marca. Esta fragancia, con su distintiva firma de rosa fresca y moderna, estableció un nuevo estándar en perfumería femenina contemporánea. La casa se distingue por creaciones que celebran una feminidad natural y sofisticada, como Love Story, Nomade y las variaciones de la línea Roses, incluyendo Rose Tangerine y Naturelle. Cada fragancia Chloé refleja el espíritu libre y romántico de la marca de moda, con frascos que evocan detalles plisados y lazos que son emblema de la casa. Las composiciones equilibran frescura moderna con elegancia atemporal, apelando a una mujer que valora tanto la sofisticación como la autenticidad.