El polvo de arroz como nota olfativa representa una de las facetas más refinadas y vintage de la perfumería. Este acorde recrea la sensación olfativa de los tradicionales polvos cosméticos, combinando notas dulces, suaves y ligeramente almizcladas. En las fragancias, aporta una textura aterciopelada característica que evoca la delicadeza de los tocadores de época, con matices de almidón, vainilla suave y un sutil toque mineral. Es frecuentemente utilizado en perfumes orientales y florales para crear una sensación de elegancia retro y sofisticada feminidad.