El hassaku es uno de los muchos cítricos japoneses. Es muy parecido a un pomelo grande, pero mucho más dulce y jugoso. Es más limón que pomelo.

En Japón, el hassaku se utiliza tradicionalmente para preparar té y galletas para acompañarlo. También del hassaku se extrae aceite, famoso por su efecto balsámico y calmante. Los pasteleros no prescinden de él; añadirlo a tartas, galletas y pasteles les da un sabor especial: la ralladura. El fruto también se utiliza para hacer incienso.

En perfumería, las notas de hassaku añaden sofisticación, glamour y misterio al bouquet general.